Albert Bulgues (MDT)
14/6/2012
Països Catalans
El frente de izquierdas del PCC: la Syriza catalana
En el VI Congreso que realizó Esquerra Unida i Alternativa (EUiA) el primer fin de semana de junio en Sabadell se certificó el acta de defunción de la misma (y por tanto de las supuestas organizaciones marxistas que se encuadran dentro de ésta, y que ostentan la mayoría; es decir: PCC, PSUC viu y POR) como organización transformadora (en un sentido progresivo según la teoría del materialismo histórico).
Hace tiempo que personas que en algún momento de nuestra vida militante hemos pasado por las filas del PCC (o la CJC-Joventut Comunista) nos vamos dando cuenta que su apuesta por el Frente de izquierdas no dejaba de ser una apuesta por una alianza interclasista con partidos actualmente defensores de los intereses de las clases dominantes en mayor o menor medida (PSC, ERC, ICV) en la medida que rechazan toda perspectiva de transformación socialista de la sociedad catalana (por tanto, les convierte abiertamente en partidos conservadores, es decir, que pretenden conservar el actual modo de producción capitalista).
Por si eso pareciera que me lo estoy inventando yo, no tienen más que buscar las declaraciones que hicieron en los medios de comunicación los dirigentes del PCC Joan Josep Nuet (actual coordinador general de EUiA) o Jordi Miralles (antiguo coordinador general). Cuando Miralles dijo "no hay más que una forma de hacer política y de salir de la crisis", evidentemente, hacía referencia a que hay salidas diferentes a la crisis dentro de las reglas del juego del sistema capitalista, es decir, la eterna creencia en una salida keynesiana a la crisis del capitalismo. Nuet, en su discurso una vez acabado el proceso congresual, habla de medidas programáticas como la dación en pago (es decir, la entrega de las llaves para saldar la deuda, pero reconociendo la propiedad privada de los bienes inmuebles), habla de reforma fiscal y de banca pública (pero no habla de la expropiación de la banca sin indemnización). Creo que podría dar más ejemplos, pero no hace falta. El ejemplo más clarificador del abandono de esta formación de toda perspectiva transformadora es la pertenencia al Partido de la Izquierda Europea (PIE), es decir, aceptar el marco imperialista y capitalista de la UE, enriqueciendo su engranaje. Y es que para los dirigentes del PCC está muy claro donde se han de mirar: en el Front de Gauche francés o la Syriza griega, organizaciones que o bien no hay género de dudas en que tejen alianzas con los representantes de la burguesía de la II Internacional (PSF, PASOK) o directamente son buena parte de ex-militantes de estas organizaciones.
El rechazo a toda ruptura democrática con el Estado imperialista español
También nos quedó claro hace tiempo a los que pasamos por las filas del PCC que sus discursos por el derecho a la autodeterminación no dejaban de ser palabras vacías y sin contenido. La apuesta programática de EUiA es un concierto económico "solidario", es decir, cambiar las cosas para no cambiar nada, mantener a los Països Catalans bajo dominación política española y francesa, es decir, la defensa del imperialismo español y francés. Hablan abiertamente de hermanamiento con una España que se ha construido como proyecto de aniquilación de las realidades nacionales oprimidas por el Estado (Castilla, Andalucía, Asturies, etc.)
Ante todo esto, solo hay una alternativa clara para avanzar hacia la ruptura con los Estados ocupantes y con el sistema de dominación y explotación capitalista: fortalecer la CUP como única alternativa posible para avanzar hacia la independencia y por tanto, hacia el socialismo en los Països Catalans.
14/6/2012
Països Catalans
El frente de izquierdas del PCC: la Syriza catalana
En el VI Congreso que realizó Esquerra Unida i Alternativa (EUiA) el primer fin de semana de junio en Sabadell se certificó el acta de defunción de la misma (y por tanto de las supuestas organizaciones marxistas que se encuadran dentro de ésta, y que ostentan la mayoría; es decir: PCC, PSUC viu y POR) como organización transformadora (en un sentido progresivo según la teoría del materialismo histórico).
Hace tiempo que personas que en algún momento de nuestra vida militante hemos pasado por las filas del PCC (o la CJC-Joventut Comunista) nos vamos dando cuenta que su apuesta por el Frente de izquierdas no dejaba de ser una apuesta por una alianza interclasista con partidos actualmente defensores de los intereses de las clases dominantes en mayor o menor medida (PSC, ERC, ICV) en la medida que rechazan toda perspectiva de transformación socialista de la sociedad catalana (por tanto, les convierte abiertamente en partidos conservadores, es decir, que pretenden conservar el actual modo de producción capitalista).
Por si eso pareciera que me lo estoy inventando yo, no tienen más que buscar las declaraciones que hicieron en los medios de comunicación los dirigentes del PCC Joan Josep Nuet (actual coordinador general de EUiA) o Jordi Miralles (antiguo coordinador general). Cuando Miralles dijo "no hay más que una forma de hacer política y de salir de la crisis", evidentemente, hacía referencia a que hay salidas diferentes a la crisis dentro de las reglas del juego del sistema capitalista, es decir, la eterna creencia en una salida keynesiana a la crisis del capitalismo. Nuet, en su discurso una vez acabado el proceso congresual, habla de medidas programáticas como la dación en pago (es decir, la entrega de las llaves para saldar la deuda, pero reconociendo la propiedad privada de los bienes inmuebles), habla de reforma fiscal y de banca pública (pero no habla de la expropiación de la banca sin indemnización). Creo que podría dar más ejemplos, pero no hace falta. El ejemplo más clarificador del abandono de esta formación de toda perspectiva transformadora es la pertenencia al Partido de la Izquierda Europea (PIE), es decir, aceptar el marco imperialista y capitalista de la UE, enriqueciendo su engranaje. Y es que para los dirigentes del PCC está muy claro donde se han de mirar: en el Front de Gauche francés o la Syriza griega, organizaciones que o bien no hay género de dudas en que tejen alianzas con los representantes de la burguesía de la II Internacional (PSF, PASOK) o directamente son buena parte de ex-militantes de estas organizaciones.
El rechazo a toda ruptura democrática con el Estado imperialista español
También nos quedó claro hace tiempo a los que pasamos por las filas del PCC que sus discursos por el derecho a la autodeterminación no dejaban de ser palabras vacías y sin contenido. La apuesta programática de EUiA es un concierto económico "solidario", es decir, cambiar las cosas para no cambiar nada, mantener a los Països Catalans bajo dominación política española y francesa, es decir, la defensa del imperialismo español y francés. Hablan abiertamente de hermanamiento con una España que se ha construido como proyecto de aniquilación de las realidades nacionales oprimidas por el Estado (Castilla, Andalucía, Asturies, etc.)
Ante todo esto, solo hay una alternativa clara para avanzar hacia la ruptura con los Estados ocupantes y con el sistema de dominación y explotación capitalista: fortalecer la CUP como única alternativa posible para avanzar hacia la independencia y por tanto, hacia el socialismo en los Països Catalans.
Este artículo está escrito por un psicópata que salió rebotado de los CJC. Si os fijais, solo repite incesantemente una sarta to tópicos que no justifica.
ResponderEliminarHabría que asegurar las fuentes antes de publicar delirios de desequilibrados.
Si hemos publicado este artículo es porque estamos de acuerdo con lo que dice. Hay que saber aceptar las críticas, ninguna organización es intocable. No hacerlo sería faltar al leninismo...
ResponderEliminarPues a mi me ha parecido una buena forma de explicar o de dejar en evidencia a determinados sectores/organizaciones que el republicanismo español puede ser igual de pequeño-burgués que lo puede ser el soberanismo. Tanto el republicanismo español puede tener carácter de clase como el soberanismo, PERO claro... ese carácter de clase se rompe cuando se justifica el mantenimiento de España como entidad pseudo-nacional... y dada el particular problema nacional existente dentro del Estado... En fin, ¡Que vivan las CUP!
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